Cristián Juliao fue recibido con honores tras el Mundial Sub-20

En medio de una entusiasta jornada, la comunidad de Barrancabermeja le dio una cálida bienvenida a Cristián Juliao, tras su regreso del Mundial Sub-20 de fútbol, donde la selección Colombia obtuvo un destacado tercer puesto. La actividad fue organizada de manera express, pero logró una convocatoria sobresaliente, en la que participaron estudiantes, entrenadores, autoridades locales y medios de comunicación.

El acto se llevó a cabo en el Instituto Mariano, con la presencia de la concejal Leila Noguera, quien también se perfila como futura representante. Allí, Juliao compartió su experiencia en el torneo y dirigió palabras emotivas a los asistentes, en especial a los más jóvenes.

“Con los niños soy feliz y estoy plenamente convencido de que, aunque muchos no lleguen al fútbol profesional, sí pueden ser personas de bien gracias a los valores que les da el deporte”, afirmó. Sus palabras resaltaron la importancia de la disciplina, el esfuerzo y la perseverancia como aprendizajes esenciales.

Juliao también agradeció a los profesores que lo han acompañado durante años, destacando el papel de los entrenadores locales en la formación de talentos. “Ellos me ven como un ejemplo a seguir, y eso me llena de responsabilidad y gratitud”, aseguró.

Durante su intervención, recordó los retos personales y profesionales que ha enfrentado en su trayectoria, y cómo la fe, la familia y el deporte lo han sostenido. “Soy creyente en Dios y estoy enamorado de mi familia, no solo la de sangre, sino la que me ha acompañado en cada proyecto”, agregó.

Juliao confesó que, aunque soñó con ser futbolista profesional, entendió que no tenía el talento necesario y decidió estudiar para cumplir su promesa de vivir del fútbol. Hoy, lleva casi dos décadas dedicado de lleno a esta pasión, y se ha convertido en un referente para las nuevas generaciones.

En su discurso también hizo una reflexión sobre el impacto del deporte en la sociedad. “Pensábamos mucho en que, si éramos campeones, eso traería inversión social y deportiva para el país”, expresó, dejando en claro su compromiso con el desarrollo de los territorios a través del fútbol.

Finalmente, reiteró su aspiración de llegar al fútbol internacional, aunque señaló que sus planes están en manos de Dios. “Los tiempos de Dios son perfectos”, concluyó, generando una ovación entre los asistentes.

El evento cerró con muestras de afecto y orgullo por parte de la comunidad barranqueña, que ve en Juliao un símbolo de esfuerzo, humildad y amor por el deporte.