Senador Gustavo Moreno pide Diálogo con camioneros y revisar la política de hidrocarburos

En un mensaje difundido a través de sus redes sociales, el senador Gustavo Moreno hizo un llamado al gobierno nacional para que se siente a dialogar con los transportadores que están realizando bloqueos en diferentes vías del país debido al alza de los precios de los combustibles y peajes. Moreno resaltó que, si bien los camioneros tienen razones legítimas para protestar, la situación también está afectando a otros sectores de la población, como estudiantes y trabajadores, quienes se ven impedidos de movilizarse con normalidad.

El senador expresó su preocupación por las consecuencias que el paro de transportadores podría tener en el costo de vida de los colombianos. Según Moreno, el aumento en los precios del transporte de mercancías impactará directamente el precio de los alimentos y medicamentos, lo que, de acuerdo con expertos, podría generar un incremento del 2% en el costo de vida.

En su intervención, Moreno destacó que este tipo de paros no es un fenómeno exclusivo del actual gobierno, ya que, históricamente, cada administración ha enfrentado protestas similares por el precio de los combustibles y el costo de los fletes. Sin embargo, subrayó que el Congreso de la República debe buscar una solución estructural a este problema.

El senador propuso que el gobierno revise la política de hidrocarburos en Colombia, particularmente en lo que respecta a las regalías que el país recibe por la explotación de estos recursos. Moreno criticó que el Estado colombiano solo obtenga el 20% de las ganancias, mientras que en otros países la proporción es significativamente mayor, alcanzando entre el 30% y el 40%.

Finalmente, Moreno advirtió que el país no cuenta con un desarrollo adecuado en infraestructura ferroviaria o en el uso del río Magdalena para el transporte de carga, lo que ha obligado a depender en gran medida de camiones y tractomulas. Este sistema, según el senador, termina trasladando los costos adicionales de los peajes y combustibles directamente a los ciudadanos, quienes ya están sufriendo el impacto económico.