En un mural se rinde homenaje a la niña Elizabeth Durán

En un acto que fusiona el arte urbano con el sentido de comunidad, un mural ha surgido como un tributo conmovedor a la memoria de Elizabeth Durán, la niña cuya vida se vio truncada trágicamente hace algunas semanas. Lo que antes fue un lugar de tristeza y lamento se ha transformado en un lienzo donde la belleza de su espíritu perdurará para siempre.

El artista  Gutiérrez ha liderado este proyecto, plasmando la expresividad y la inocencia de Elizabeth en cada pincelada. Pero la creación de este mural no fue solo un acto artístico; requirió la colaboración de la comunidad, que se unió para preparar la pared y hacer posible esta emotiva obra.

La frase “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe” acompaña ahora la imagen de la niña Elizabeth, recordando su corta pero significativa vida. Este mural, ubicado en las inmediaciones de Pason Nivel, no solo honra su memoria, sino que también simboliza la unión de una comunidad que lucha por evitar tragedias similares en el futuro.

Anoche, vecinos, amigos y familiares se reunieron en una emotiva vigilia en memoria de Elizabeth. Sus palabras y gestos reflejaron el profundo impacto que su partida ha tenido en la comunidad. Todos juntos, en un momento de reflexión y oración, recordaron el legado de esta pequeña barranqueña que, a pesar de su corta edad, dejó una huella imborrable en quienes la conocieron.