Reportero Ciudadano
Cámaras exponen a quienes botan basura en calle 60 de Barrancabermeja
🚯 Vecinos vigilan con cámaras a infractores que contaminan la vía pública 📷https://youtu.be/xuco-46m9u0
Tras meses de acumulación constante de basura en el separador de la calle 60, entre las carreras 19 y 21, los habitantes del barrio Galán en Barrancabermeja lograron identificar a los responsables de este problema ambiental y de convivencia. Gracias a la instalación de un circuito cerrado de cámaras de seguridad, la comunidad ha comenzado a registrar en video a las personas que dejan desechos en horarios indebidos.
La iniciativa surgió por parte de la Unión de Vecinos, que además de buscar seguridad frente a hechos delictivos, ahora usa la tecnología para combatir la falta de cultura ciudadana relacionada con la disposición inadecuada de residuos sólidos.
Las grabaciones han permitido detectar a personas provenientes de barrios aledaños, quienes llegan en vehículos o a pie para arrojar basura en días no autorizados, afectando gravemente la imagen del sector. Estas acciones han convertido la zona en un foco de contaminación y malos olores.
El problema se agrava cuando animales callejeros y habitantes de calle rompen las bolsas, esparciendo los desechos por toda la vía. Esto genera no solo un impacto visual negativo, sino también riesgos sanitarios para la comunidad que habita cerca de este punto.
Los vecinos recuerdan que el servicio de recolección de basuras en esta calle opera únicamente los lunes, miércoles y viernes, después de las 9:00 p.m.. Pese a ello, muchos ciudadanos siguen sacando sus residuos en días no autorizados, contribuyendo al deterioro del entorno.
Desde las cámaras ya se han identificado varios infractores, y los videos podrían ser utilizados como evidencia para posibles acciones legales o sanciones por parte de las autoridades locales. La comunidad pide más apoyo institucional para garantizar el cumplimiento de las normas de manejo de residuos.
Los líderes del sector han hecho un llamado urgente a la ciudadanía para que respete los horarios de recolección y evite convertir los espacios públicos en botaderos improvisados. La limpieza y la convivencia dependen del comportamiento responsable de todos los habitantes.
La estrategia de vigilancia seguirá activa mientras persista el problema. Los residentes afirman que no bajarán la guardia hasta recuperar completamente la tranquilidad y la limpieza del barrio Galán.
Este caso evidencia cómo la organización vecinal y el uso de la tecnología pueden ser herramientas efectivas para enfrentar problemas cotidianos que afectan la calidad de vida urbana.
