No existe edad para la fiebre aurinegra

Martín Andrés Quevedo, un niño de cinco años, es una prueba viviente de que no hay límite de edad para sentir pasión por el deporte. Su amor incondicional por el Alianza petrolera lo convierte en un ejemplo inspirador. Martín nos cuenta que elige al Alianza como su equipo favorito porque representa a nuestro país y a nuestra ciudad. A pesar de su corta edad, ha demostrado su apoyo inquebrantable a través de cánticos y alientos en redes sociales.

En un partido próximo, Martín espera una victoria contundente del Alianza petrolera, pronosticando un marcador de 10-0 a favor de su equipo. Su jugador favorito es el arquero “chunga”, a quien admira profundamente. Sus videos han capturado la atención de los aficionados y se han viralizado rápidamente, compartiendo la emoción que este joven fanático transmite.

En una entrevista exclusiva, la abuelita de Martín revela el origen de esta pasión desbordante. Desde muy pequeño, Martín se ha sentido atraído por el deporte, influenciado por su padre, quien es deportista y trabajador de Inderba. A pesar de su corta edad, Martín se ha convertido en un ejemplo para los hinchas del Alianza Petrolera y para aquellos que encuentran en el deporte una fuente de alegría y pasión.

La historia de Martín inspira a otros jóvenes y adultos a seguir sus pasiones deportivas con la misma intensidad y entusiasmo. Nos recuerda que el amor por un equipo trasciende barreras y puede ser vivido y disfrutado a cualquier edad. Su entusiasmo contagioso demuestra que el deporte tiene el poder de unir a las personas y llenar sus corazones de emoción y alegría. Además, alienta a los jugadores del Alianza petrolera a dar lo mejor de sí en el siguiente partido.