Uno de los uniformados fallecidos en atentado en Tibú era santandereano
Autoridades anunciaron recompensa de 200 millones de pesos por información sobre el atentado en Tibú
El cuerpo del subintendente Ángelo Raúl Martínez Arévalo, de 30 años de edad, será trasladado a Piedecuesta, su ciudad natal, luego del trágico atentado ocurrido en la tarde del miércoles 24 de mayo en donde perdió la vida, junto con la de un patrullero y un ciudadano, en Tibú, Norte de Santander.
El subintendente Martínez Arévalo había sido transferido a Tibú hace tan solo un mes, donde desempeñaba labores como gestor de participación en la Estación de Policía local. La Policía Metropolitana de Bucaramanga confirmó que el cuerpo del uniformado será llevado a Santander, en donde se le rendirá un homenaje por sus servicios y se brindará apoyo a su esposa y sus dos hijas, de 6 y 4 años, en la residencia familiar en Piedecuesta, contando con el acompañamiento de una psicóloga y una suboficial del comando.
El Ministerio de Defensa condenó enérgicamente el atentado contra la Policía Nacional y la comunidad de la región se encuentra atemorizada. Se solicita apoyo para esta población y se insta a llevar a cabo las investigaciones correspondientes para esclarecer lo sucedido. Como medida adicional, las autoridades ofrecieron una recompensa de hasta 200 millones de pesos por cualquier información que ayude a capturar a los responsables del atentado.
El hecho ocurrió cuando explosivos fueron detonados en la vía La Uno en Tibú. Las víctimas fueron trasladadas a un centro asistencial, pero lamentablemente, tres de ellas presentaban heridas graves que resultaron fatales. Los demás heridos, tanto policías como ciudadanos, fueron trasladados a la ciudad de Cúcuta. Este mismo jueves estaba programado realizar un Consejo de Seguridad en el municipio con la presencia del ministro de Defensa.
