Ecopetrol reafirma su papel clave en la transición energética de Colombia

Durante su intervención en el foro de energía y transformación para Colombia, el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, destacó que el negocio tradicional de hidrocarburos sigue siendo la base financiera para impulsar una transición energética confiable y sostenible en el país.

El evento, organizado por la Unión Sindical Obrera (USO) en Barrancabermeja, sirvió como escenario para presentar los avances de la compañía en su proceso de transformación. Roa explicó que este compromiso fue asumido desde la negociación de la Convención Colectiva de Trabajo 2023-2024.

El directivo señaló que la descarbonización y la eficiencia energética son pilares esenciales para garantizar que esta transición sea viable a largo plazo. Además, enfatizó que Ecopetrol ya es el mayor autogenerador de energía en Colombia, con un consumo equivalente al 12 % de la demanda nacional.

Uno de los puntos clave expuestos fue la meta de alcanzar 900 MW de energías limpias al 2030. Roa anticipó que al cierre de este año Ecopetrol alcanzará los 13 MW, y que para finales de 2026 se proyecta una capacidad instalada de 3.300 MW provenientes de fuentes renovables no convencionales.

En su presentación, también resaltó la importancia del gas natural como parte esencial de la matriz de transición. Anunció que la compañía ha liberado gas de sus plantas para destinarlo a la industria, con una reducción del consumo interno del 14 % el año anterior y del 8 % en los últimos meses.

Roa informó que Ecopetrol ya abrió el proceso de comercialización de entre 12 y 26 gigavatios día de gas para los años 2026, 2027 y 2028, lo cual busca asegurar el abastecimiento energético futuro del país.

Además de los esfuerzos en generación limpia, el presidente de Ecopetrol aseguró que todas las líneas de negocio muestran crecimiento, incluyendo transporte, refinación y producción, lo que fortalece las bases económicas para sostener la transición.

A pesar del enfoque en nuevas tecnologías, Roa fue enfático en que no se puede poner en riesgo la confiabilidad del sistema energético nacional, por lo que el proceso debe ser responsable y equilibrado.

Finalmente, invitó a los asistentes del foro a utilizar estos espacios como plataformas para el diálogo y la construcción colectiva del modelo energético del futuro, en articulación con los desafíos globales de sostenibilidad.