Mujeres de negro marcharon en Barrancabermeja por la vida y la justicia

Vestidas de negro, con pañoletas blancas y pancartas en mano, las “Mujeres de Negro” recorrieron en silencio las calles de Barrancabermeja para protestar contra la violencia de género, honrar la memoria de las víctimas y exigir justicia por los casos que aún no han sido resueltos.

A través de una caminata silenciosa, esta manifestación se convirtió en un poderoso mensaje colectivo. Un ataúd simbólico encabezó la marcha, representando a todas aquellas mujeres cuyas voces fueron apagadas, pero cuya memoria sigue viva. Las participantes caminaron sin pronunciar una sola palabra, pero su presencia habló por miles.

Cada mirada, cada gesto y cada paso fue una denuncia silenciosa contra la impunidad y el olvido. El silencio se convirtió en símbolo de dolor, resistencia y esperanza.

“La marcha de las Mujeres de Negro es un acto de duelo y también de vida. Queremos que nuestra presencia haga reflexionar a la sociedad. Que la vida de una mujer no siga siendo un riesgo”, expresó una de las participantes.

Esta manifestación no solo honró a quienes ya no están, sino que también fue un llamado urgente a las autoridades para que garanticen la protección de los derechos de las mujeres y aseguren que ninguna historia de violencia quede impune.

Las calles de Barrancabermeja fueron escenario de un clamor que no necesitó de gritos: en cada silencio marchó una historia, una pérdida, un anhelo de justicia. Y, sobre todo, la firme decisión de no permitir que ninguna mujer más sea silenciada.