En un comunicado publicado en redes sociales, la EPS Compensar informó que ha presentado una solicitud de liquidación voluntaria ante la Superintendencia de Salud. Después de más de 30 años de servicio en el sistema de seguridad social en salud de Colombia, Compensar EPS ha decidido retirar de manera total y voluntaria su programa del sistema.

La decisión de solicitar la liquidación voluntaria se debe a la compleja situación financiera que enfrenta el sistema de salud en Colombia. Esta situación ha afectado considerablemente la viabilidad y sostenibilidad del programa Compensar EPS, impidiéndole garantizar el servicio a sus afiliados en las condiciones de calidad y oportunidad que siempre han caracterizado a la entidad.

A pesar de la solicitud de liquidación, Compensar EPS se compromete a seguir atendiendo a sus usuarios de la mejor forma posible hasta el último día en que estén a su cargo. Realizarán una entrega ordenada de la población a la entidad que el gobierno defina, asegurando que los servicios se seguirán prestando según lo programado.

Compensar EPS cuenta con aproximadamente 2.300.000 pacientes y destaca el trabajo realizado como prestadora de salud. Durante más de 30 años, han llevado a cabo cerca de 70 millones de actividades de salud cada año, con un equipo humano de más de 1.700 colaboradores, 3.800 IPS y 7.800 profesionales de la salud. Han salvado millones de vidas diariamente, han mejorado la calidad de vida de miles de personas a través de programas de promoción de la salud y prevención de enfermedades, y han alegrado a miles de familias con cerca de 15.000 partos anuales.

El director de Compensar EPS, Carlos Mauricio Vásquez, asegura que los servicios seguirán siendo prestados según lo programado y que los pacientes tienen la libertad de cambiar de prestadora de salud si así lo desean. En caso de que la Superintendencia de Salud apruebe la liquidación, el traspaso de los pacientes se realizará de manera organizada.

La decisión de solicitar la liquidación se debe a un problema estructural del sistema de salud que hace insostenible la operación de Compensar EPS. Aunque seguirán operando en caso de que su solicitud sea negada, entienden la inviabilidad de su operación y hacen un llamado a reflexionar sobre el funcionamiento de todas las partes del sistema de salud en su conjunto.

La incertidumbre sobre el futuro del sistema de salud es uno de los principales argumentos para solicitar la liquidación. Compensar EPS busca tener un cese de obligaciones organizado que no cause un impacto demasiado grande en los pacientes, permitiéndoles continuar con sus tratamientos de manera adecuada.

Desde el año 2023, Compensar EPS ha estado en diálogo con la Superintendencia de Salud, presentando los problemas que enfrentan y solicitando acciones inmediatas. Sin embargo, no han recibido una respuesta efectiva, lo que los ha llevado a tomar la decisión de solicitar la liquidación.

Según fuentes del alto gobierno, se ha confirmado que la Superintendencia Nacional de Salud está interviniendo a la Nueva EPS, la entidad más grande de Colombia con cerca de 11 millones de usuarios. Cabe destacar que muchos de los usuarios de las EPS que han sido intervenidas en el pasado han llegado a esta entidad, la cual ahora también está siendo objeto de intervención.

El Gobierno Nacional ha confirmado a Noticias Caracol que esta acción forma parte de un plan para salvar el sistema de salud, y no se trata de una revancha por el posible hundimiento de la reforma en el Congreso. Según argumentan, esta intervención responde a requerimientos técnicos y a cuentas pendientes con otras entidades de la Contraloría.

Noticias Caracol ha podido confirmar que no solo la Nueva EPS está siendo intervenida, sino que todo el sistema de servicios de esta entidad está siendo sometido a una revisión especial. Esta medida se suma a la intervención realizada en aproximadamente 24 horas a Sanitas, otra EPS que también se encuentra en manos del Estado.

Con estas dos intervenciones, el Estado asume la responsabilidad de cerca de 18 millones de usuarios del sistema de salud. No se descarta la posibilidad de que otras de las 21 EPS del país que presentan problemas financieros también sean intervenidas en el futuro.

La intervención de la Nueva EPS y otras entidades del sistema de salud responde a la necesidad de garantizar la prestación de servicios de calidad a los usuarios. El Gobierno Nacional ha dejado claro que esta medida no busca afectar a los usuarios ni perjudicar a las EPS, sino más bien fortalecer y salvar el sistema de salud en Colombia.

Es importante recordar que el sistema de salud en el país ha enfrentado diversos desafíos en los últimos años, incluyendo problemas financieros, falta de atención oportuna y deficiencias en la calidad de los servicios. Por tanto, estas intervenciones buscan corregir estas situaciones y garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a una atención médica adecuada.

En conclusión, la intervención de la Nueva EPS por parte del Gobierno es una medida tomada con el objetivo de mejorar el sistema de salud en Colombia. Aunque pueda generar preocupación entre los usuarios, se espera que esta acción contribuya a solucionar los problemas financieros y garantizar la calidad de los servicios. Es importante que todas las entidades del sistema de salud trabajen en conjunto para lograr una atención médica eficiente y de calidad para todos los ciudadanos.

La situación por el aumento de casos de dengue en San Gil ha llevado a que el municipio sea oficialmente declarado en brote de la enfermedad. La alcaldía ha decretado la calamidad pública debido al número de personas contagiadas por el mosquito Aedes aegypti.

Según el último boletín epidemiológico emitido por la Secretaría de Salud Departamental, San Gil se encuentra en situación de brote de dengue tipo II. Durante las semanas 1 a 13 del año 2024 se han reportado 278 casos notificados, de los cuales 111 han sido confirmados, según informó la alcaldía de San Gil en un comunicado.

Carlos Gómez Mogrovejo, profesional técnico operativo del grupo de Enfermedades Transmitidas por Vectores (ETV) en Santander, explicó que inicialmente el contagio se presentaba principalmente en algunos sectores del casco urbano, pero ahora se evidencia la propagación en todo el municipio. Además, el brote tipo II indica un aumento constante en los casos por encima de lo esperado después de un seguimiento de seis semanas continuas.

Los barrios más afectados por el dengue en San Gil son:

• Centro: 26 casos
• Bella Isla: 19 casos
• Villa Olímpica: 13 casos
• Pablo VI: 5 casos
• Ciudad Blanca: 4 casos
• Coovip: 4 casos

Además, barrios como Carlos Martínez, El Bosque, Fátima, Villa Carola, El Vergel y Luis Carlos Galán reportan 3 casos cada uno. Los demás barrios tienen menos de 2 casos.

Gómez también destacó la importancia de identificar el zancudo y su vector (huevos o larvas), siendo estos últimos la principal preocupación. Cerca del 80% de la población del mosquito Aedes aegypti se está criando en albercas, baldes, tanques y otros recipientes donde la comunidad no está realizando el control ni la limpieza necesaria.

El hospital regional de San Gil es el principal receptor de pacientes con dengue en el municipio. Solo en marzo se atendieron 96 personas con dengue, una cifra que duplica los registros de enero de este mismo año, según indicó Eder Benítez, subdirector científico de la institución.

Aunque no se han reportado muertes a causa de las complicaciones del dengue, Benítez mencionó que entre febrero y marzo unas 12 personas tuvieron que ser tratadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) debido a la fase crítica de la enfermedad y la necesidad de un seguimiento riguroso de las condiciones de los pacientes.

El subdirector también expresó que uno de los desafíos ha sido garantizar las transfusiones de sangre y plaquetas, a pesar de no contar con un banco de sangre. Este servicio depende de un convenio existente con Higuera Escalante. Según el cálculo del hospital, cerca del 5% de los casos consultados han terminado en la UCI, un índice que se ajusta a los parámetros establecidos.

Ante la situación, la Subsecretaría de Salud solicitó a la Secretaría de Salud Departamental que se considere realizar un control químico o fumigación en San Gil para contrarrestar la picadura del mosquito. Las acciones de información en salud para prevenir, controlar o mitigar esta enfermedad no han arrojado resultados favorables.

En respuesta, Gómez explicó que la fumigación es una de las últimas medidas que se toman debido a los riesgos que conlleva. Este proceso también puede matar otros insectos y controladores naturales del mosquito. Además, el uso frecuente de venenos en los hogares genera resistencia en las especies, reduciendo la efectividad de los químicos en situaciones de emergencia.

Por ahora, profesionales del grupo de ETV Departamental están realizando visitas a las viviendas, identificando factores de riesgo y brindando las recomendaciones necesarias. Se insta a la comunidad a atender a los profesionales debidamente identificados y permitirles el acceso a las casas.