Reservistas policiales protestan por mala prestación del servicio de salud

Desde las primeras horas de la mañana, un grupo de reservistas policiales ha llevado a cabo un plantón frente al establecimiento de Sanidad Policial. La protesta busca llamar la atención sobre la mala prestación del servicio de salud tanto para el personal activo como para quienes se encuentran en el buen retiro de la fuerza pública nacional.

Los manifestantes exigen una mejora en la atención médica que reciben, alegando incumplimientos y algunas inconsistencias en la prestación del servicio de salud. Esta manifestación se extiende a nivel nacional y busca generar un espacio de diálogo para encontrar soluciones a estas problemáticas.

Los reservistas de la Policía Nacional buscan establecer una mesa de trabajo en la que puedan discutir y acordar medidas que garanticen una atención médica adecuada para ellos y sus compañeros. Denuncian dificultades en la obtención de citas médicas, falta de médicos especialistas disponibles y problemas en la entrega de medicamentos esenciales.

Jairo Forero, veedor de salud de la policía, detalló algunas de las dificultades que han llevado a la realización de esta protesta. Entre ellas, mencionó la falta de un canal de comunicación eficiente para la programación de citas médicas y la escasez de médicos especializados disponibles para atender las necesidades de los usuarios.

Además, se señaló que los problemas no se limitan únicamente a la falta de atención médica adecuada, sino que también incluyen inconvenientes con la entrega de medicamentos. Se mencionó un contrato millonario para la entrega de medicamentos que habría tenido complicaciones, lo que afecta directamente la salud de los miembros de la Policía Nacional.

En busca de una solución a estas problemáticas, los reservistas hicieron un llamado a las autoridades competentes y a la dirección de sanidad de la Policía Nacional. Esperan que sus reclamos sean escuchados y que se tomen medidas concretas para mejorar la prestación del servicio de salud y garantizar el derecho fundamental a la atención médica adecuada para todos los miembros de la fuerza pública.