Siguen embelleciendo el sector del Cristo Petrolero

El sector del Cristo Petrolero sigue siendo objeto de atención y amor por parte de los barranqueños, quienes se han propuesto recuperar y embellecer este lugar emblemático. Moriah es el reflejo del deseo de restaurar lo perdido y convertirlo en una realidad.

Durante mucho tiempo, el sitio se encontraba abandonado y en un estado de deterioro considerable, cubierto por la densa vegetación que dificultaba su acceso y disfrute. Sin embargo, gracias a seis meses de arduo trabajo, estas familias han logrado recuperar el espacio y embellecerlo, manteniéndolo limpio y adecuado para que las personas puedan visitarlo.

El proyecto ha ido más allá de la limpieza, incluyendo la artesanía y la gastronomía como parte del encanto del lugar. La idea de vender comida surgió como una oportunidad para ofrecer una experiencia agradable a las familias que lo visitan, aprovechando el entorno para resaltar los platos especiales de la región.

El sector del Cristo Petrolero se ha convertido en un espacio acogedor donde las personas pueden disfrutar de momentos agradables en familia. Se han retirado tierra, escombros y maleza para dar vida a Moriah, un lugar elegido por su belleza natural y que invita a tomarse fotos, contemplar el paisaje y observar las babillas y las iguanas.

Además, los domingos se llevan a cabo actividades especiales y se ofrece comida y productos para el disfrute de los visitantes, especialmente los niños, a quienes se les enseña la importancia de cuidar el medio ambiente, la flora y la fauna local. Este compromiso refleja el deseo de un grupo de ciudadanos de acondicionar un espacio que promueva el amor por la naturaleza y el talento cultural de la región.