Desafíos y perspectivas para futuros intentos de la reforma laboral

La esperada reforma laboral, uno de los proyectos emblemáticos del gobierno de Gustavo Petro, ha sufrido un revés definitivo al hundirse en el Congreso de la República durante las últimas horas de la primera legislatura del periodo 2022-2026.

Aunque se había intentado discutir en ocasiones anteriores y la ponencia correspondiente había sido aprobada en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, la reforma laboral no logró avanzar en su primer debate y, por lo tanto, no pudo ser incluida en las sesiones extraordinarias.

El analista político Carlos Arias explicó que las sesiones extraordinarias son una continuación de la legislatura actual y solo pueden incluir los proyectos que estén en trámite. En el caso de la reforma laboral, al no haber sido aprobada en su primer debate en la Comisión Séptima, no pudo ser considerada en las sesiones extraordinarias.

El artículo 190 de la Ley 5 de 1992 establece que los proyectos que no hayan completado su trámite en una legislatura y sean aprobados en primer debate en alguna de las Cámaras, continuarán su curso en la siguiente legislatura en el estado en que se encuentren. Sin embargo, ningún proyecto puede ser considerado en más de dos legislaturas.

Las razones detrás del hundimiento de la reforma laboral se atribuyen a la falta de consenso político y a la dificultad de conciliar las visiones ideológicas de los sindicatos y el Gobierno con las capacidades económicas del país en un momento de desaceleración industrial.

El profesor Diego Escallón de la Universidad de Los Andes señala que la confrontación del presidente de la República con los partidos políticos ha debilitado la relación con el Congreso y ha restado apoyo a sus proyectos.

Por su parte, el profesor Darío Maldonado de la Escuela de Gobierno de la Universidad de los Andes comenta que el Gobierno propuso una reforma que generó tensiones entre trabajadores y empleados, cuando existen otras medidas que podrían abordar el desempleo y la informalidad laboral de manera más efectiva.

Aunque se espera que la reforma laboral tenga un segundo intento en la próxima legislatura, el profesor Escallón destaca que el Gobierno deberá reconstruir su relación con los partidos políticos, abrir espacios de diálogo real y ceder en su visión ideológica para lograr consensos. El cambio no se logra sin la colaboración de todos los actores involucrados.