“Volver obligatoria la vacunación contra el COVID-19 podría violar los derechos humanos”: OMS
Los gobiernos que obliguen a sus ciudadanos a vacunarse podrían violar derechos humanos
La Organización Mundial de la Salud (OMS) volvió a referirse a las medidas que han tomado los gobiernos del mundo para avanzar en las jornadas de vacunación contra el coronavirus y alertó que hacer obligatoria la inmunización puede violar derechos humanos o libertades civiles.
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Mike Ryan, jefe del programa de emergencias de la OMS, señaló que tanto exigir la vacunación obligatoria como pedir una prueba de vacunación a los ciudadanos para movilizarse, entrar a establecimientos o eventos masivos o trabajar es algo que no apoya la organización.
“Esto plantea problemas reales en torno a los derechos humanos y es algo que los gobiernos deben considerar con mucho cuidado. Si este tipo de mandatos se implementan, deben implementarse durante el período más breve posible y deben ser consistentes con las leyes nacionales de salud pública y derechos humanos”, dijo Mike Ryan.
Son varios los países que han estipulado estas estrategias para que mayor número de personas se vacunen generando mayor inmunización.
Colombia
En Colombia desde el día 16 de noviembre es necesario presentar el carnet de vacunación para ingresar a establacimeintos con amplio aforo. También El representante a la Cámara, Ricardo Ferro, radicó un proyecto de ley por medio de la cual la vacunación contra el Covid-19 sería obligatoria para todos los colombianos.
Según el representante, el proyecto plantea una especie de “confinamiento” para quien decida no aplicarse el medicamento, es decir, que no podría concurrir en espacios públicos.
Desigualdad
Por otra parte, el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, se refirió este martes a la pandemia del coronavirus y el avance que se ha logrado con las vacunas, pero también lanzó una advertencia sobre el acceso a los biológicos.
Por tal motivo, resaltó que la inequidad global en el acceso a las vacunas, combinada con el uso desigual e inconsistente de las medidas de salud pública está prolongando la pandemia, dando al virus más espacio para moverse y mutar.